Inicio

sábado, 9 de abril de 2011

Blog El Tonto de Santa Justa

Parece que algo se acaba en nuestro viejo modelo sanitario, que tan bien nos ha servido. En las últimas dos décadas hemos vivido una verdadera expansión cualitativa y cuantitativa en prestaciones y servicios, que han colocado nuestro sistema sanitario público si no a la cabeza mundial, sí en una situación de relativo respeto en la balanza de la eficiencia. Se han ofrecido a la población técnicas punteras en tiempo real de desarrollo – por ejemplo, el transplante de cara -, se han implementado sistemas asistenciales complejos que han sido tomados como ejemplo por países teóricamente más desarrollados en lo sanitario que nosotros - como el Reino Unido -, se han abierto nuevos hospitales y unidades, se ha desarrollado la cirugía laparoscópica, robótica y veinte mil adelantos más que no cuento para no aburrir – más de lo que puedan estar a estas alturas -, creando la impresión en el ciudadano de medicina pública imparable y de que nada es imposible. Pero ojo, todo ello a la vez que se desarrollaban dispositivos extrahospitalarios eficaces, capaces de tener una de las redes de Atención Primaria más tupidas y funcionales de los países de nuestro entorno, que garantizaba que en el último casar de la última sierra hubiera un profesional como la copa de un pino. Por no hablar del mejor de los dispositivos de urgencias extrahospitalarias, capaz de resucitar a muerto y trasladarlo en tiempo récord al hospital en las mejores condiciones para que salga en cuatro días – gestión de camas hospitalarias obliga – por su propio pie y sin merma alguna.
Read more at tontosantajusta.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Buscar este blog